Final Fantasy VIII Remastered (Análisis Platino PS4)

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Platino Final Fantasy VIII Remastered

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Buenas a tod@s

Hoy realizo una nueva entrada sobre un nuevo platino, uno de los más queridos sin lugar a dudas. Hablo del Final Fantasy VIII Remastered, una obra maestra que pudo dar más de sí en esta remasterización, y se quedó corta comparada con su obra original. Quien me conozca, sabrá que el Final Fantasy VIII es el mejor juego de la saga y de todos los tiempos para mí. Significó mucho en un pasado, el primer juego que le dediqué más horas que ninguno, el primero de la saga Final Fantasy y el que más me conmovió de todos.

Allá por el 1999, mi hermano mayor nos regaló lo que quisiésemos, como él trabajaba y era más mayor que nosotros, quiso regalarnos algo por navidad. Mi hermano eligió este juegazo nada más salir, no estaba ni en versión Platinum, costaba unas 12.000 pesetas desde entonces, sobre unos 72€, y yo elegí un set de Memory Card y un mando transparente Dualshock verde, un error sin lugar a dudas.

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Al ver a mi hermano que jugaba ese juego, en un principio no me gustaba nada de nada y lo veía aburrido para jugar, ya que había mucho que leer, era normal teniendo 9 años. Pero más tarde, supe valorar la obra maestra que tenía ante mis ojos. Vi un mundo totalmente nuevo, con unas animaciones estupendas, una historia atrapante, un modo de juego muy entretenido y lo que más me llamó, un personaje que me enamoró, llamada Selphie, esta chica construyó las bases de mi chica ideal en mi vida, aunque al final no me quedase con una igual 100%, pero sí tuve varias que compartían ese carácter y personalidad. ¿Y cómo es una chica así? Pues bajita, dulce, simpática e inocente, pero fuerte como ninguna.

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Volviendo al tema del platino y del juego, pienso que este juego lo tiene todo para ser una obra maestra, y para ser el mejor de la saga, habiendo jugado a casi todos Final Fantasy. Primero, la versión remasterizada sólo mejora en gráficos el modelado de los personajes y enemigos, pero sigue dejando en baja resolución los escenarios, haciéndolo un poco cutre en televisores de hoy en día, sin embargo, en el original habiéndolo jugado en esa época, fue impresionante, por eso, creo que es de los mejores gráficos que tuvo un juego en la Playstation 1. Habiendo mejorado los que ya habían salido en el FFVII, que tenía temática chibi y no era nada realista, y mostrando una argumento más maduro nada lioso y no necesitaron luego varios juegos y películas para organizar todo el lio que montaron, simplemente lo superó con creces.

En esta versión remasterizada, hicieron que los trofeos fuesen mucho más fáciles que en ningún otro Final Fantasy. Quitaron algunos logros que había en la versión de Steam que hacía que el juego durase bastante más, eliminando 10 logros y reduciendo considerablemente la adquisición del ansiado platino. No sé por qué hicieron eso, pero los cazadores de trofeos lo agradecieron. Había algunos logros bastantes molestos, como el acabar el juego en el nivel original de Squall, eliminar a 10.000 enemigos que te hacían pasar demasiadas horas, sin embargo en el FFIX sí está.

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El argumento para mí es de los mejores de la saga, sé que hay algunos muy buenos como el emotivo Final Fantasy X, el maravilloso y estremecedor de la novena entrega o el del FFXII, que también es muy bueno hasta casi finalizarlo, que empieza a flojear. Este me encanta porque el personaje principal, Squall, se parecía a mí cuando era más pequeño, callado y reservado, he ido cambiando con el paso del tiempo, aunque creo que estoy volviendo a mis raíces. La trama que tiene sobre los Seeds, las brujas y los caballeros, me gusta mucho, además esa escuela de Balamb me inspiró mucho en mis relatos que he ido escribiendo a lo largo de mi vida.

El estilo de batalla también me gusta mucho, ese combate a turnos clásico que tanto me encanta y las cinemáticas mientras realizas acciones, sencillamente brutal. Los sistemas de enlaces me gustaban más que ir subiendo habilidades o ir metiendo materias en objetos de batalla, ya que era más dinámico, pero no gustó por el simple hecho de que dependían de los parámetros de los personajes y el número de magias que tenías en tu poder.  Otro punto fuerte eran las invocaciones, esos guardianes de la fuerza que iban subiendo de nivel contigo, aprendiendo habilidades para ellos y para ti, además de tener unas animaciones espectaculares para la fecha. 

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Los personajes me encantaban, sobre todo Squall y Selphie, otros como Seifer un antagonista que no valía para nada y un enemigo final muy fácil de derrotar. Hacían de este juego que una maravilla argumental, cada uno con su personalidad y hacía que te emocionases con ellos. Al final con Rinoa y Squall, era imposible no soltar una lágrima. Ese Eyes on me es una canción muy buena, emotiva y con mucho sentimiento, simplemente, me enamora. Una canción dedicada a un personaje que controlas en el juego por lo que ocurren en el juego. Escucharla en YouTube y ver la letra traducida, con sólo escucharla, me emociono.



No puedo tener queja con nada, sólo en el Remastered, que fue una mierda, hablando claro. Pudieron mejorarlo todo, pero quisieron dejar la resolución como estaba con los modelos mejorados. Un trabajo a medias que tuvo descontento a los amantes de esta obra maestra como yo, es más, lo jugué en el 2019 cuando salió y lo dejé de lado por el hecho de que me había enfadado mucho, pero en la pandemia lo retomé para sacarle el platino, que era imposible que yo no lo tuviese. Amo tanto a este juego que tengo a Gryphus tatuado en mi brazo, el colgante de Squall y más tarde, su pesadilla hecha realidad en el combate final, hasta le han dedicado una canción llamada The Legendary Beast, muy buena. Ese momento cuando la enemiga final invoca a esta bestia, diciendo "Invocaré al ser que más temes, cuanto mayor sea tu mente, peor será tu tortura" Simplemente, épico.



Además, sigo teniendo el videojuego original, en su caja original, llaveros y colgantes, aunque me dio mucha rabia haber perdido el anillo que compré en Chollogames en Madrid. Era el mismo que le regaló Rinoa a Squall en el juego. Para ir finalizando porque podía extenderme muchísimo, ya que el juego lo exprimí al 100% más de 50 veces, hablaremos el mini juego de las cartas, Triple Triad, uno de los mejores mini juegos de toda la saga, exceptuando el Blitzbol. Encantaba con esa jugabilidad de cartas, además, tenían mucho peso en el juego las mejores cartas que tú podías conseguir, y necesarias para sacar el platino.

Os voy a dejar la imagen del platino (Es la misma que mi tatuaje) como es costumbre:


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Conclusión

El Final Fantasy VIII Remastered es la versión más floja de todas las existentes. Se ha trabajado muy poco en ofrecer una experiencia única y mejorada del videojuego original. Se han tocado las imágenes de las cartas, el modelado de los personajes y juegos, pero se ha mantenido la resolución original y los escenarios pierden muchísimo detalle en las pantallas de hoy en día, hasta tal punto que se ven cuadros y difuminados los detalles de los objetos.  

A pesar de todo, el Final Fantasy VIII es una obra maestra en todos los sentidos. Su banda sonora es exquisita, con temazos como Force Your Way, Find your way, The man with a machine gun, Eyes on me y muchos más.

 Una argumento único, atrapante y emotivo, con toques de adolescentes en algunas situaciones. Un sistema de batalla único y clásico de turnos como todos los juegos antiguos de la saga, entretenido y gratificante. Los personajes tienen una personalidad que enamoran, otros que están hechos para ser odiados y otros que ni deberían existir, pero ganan peso los mejores con creces. Las Situaciones nunca vistas en un juego de la saga, con batallas entre jardines que te llevarán la acción al máximo, brujas, invocaciones, misiles y robots que no decepcionan. Una dificultad más sencilla que los demás Final Fantasy, puedes subir tranquilamente como hice yo en varias ocasiones, al nivel 100 casi al final del primer CD (Hablando en términos de Playstation 1) que equivale a 15 horas o 20 horas más o menos, siendo los jefes unos blandengues que no suben de nivel a la par contigo, pero con enemigos normales que sí lo hacen y te complican la existencia.

Una duración más extensa que los anteriores juegos y que se pasan volando, porque engancha mucho, vamos que amo este juego con locura y podía estar diciendo maravillas de él toda la vida. Probadlo, se merece una oportunidad, porque es de lo mejor de lo mejor que hayáis visto en un JRPG clásico. Además, si platino es muy muy sencillo, lo único que te llevará unas horas, alrededor de 60, y para finalizar, la canción que pondré a continuación va a ser la que baile en mi boda:


Muchas gracias por leerme y nos vemos en la siguiente entrada.


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